Stop, Think, and, at last, live.
Hoy me he parado a pensar, y recordar, cómo era hace tiempo. Desde mis, échale 14 a ahora. Todo buscando música por Youtube, he encontrado cosas de mis 14-15. Y me he parado a pensar en todas las cosas que me han pasado, buenas, malas, y regulares.
Hacía mucho, muchísimo, que no hacía eso, años incluso, y antes era una práctica habitual. He pensado en mi infancia, en mis sueños de niño. Cuando crecí, cómo me sentía, cómo veía la vida, y mi futuro. Por supuesto me he llevado una gran decepción, puesto que uno de mis mayores sueños, al empezar a cumplirlo, me he dado cuenta de que no es lo que yo esperaba. NO tengo paciencia para perder 6h de mi vida cada día aprendiendo NADA. Pero bueno, eso es lo de menos.
Es cierto que tengo a una personajilla que me quiere como una loca [a veces es una pesada, sí xDDDDDD (es broma tonta :3)] y eso me hace sentirme feliz, muy pero que muy feliz. De hecho nunca pensé en encontrar a alguien con tanta paciencia, porque a veces soy cansino, pero cansino cansino.
Pero hoy, a diferencia del resto de las entradas de este blog, no voy a hablar de eso. Vengo a hablar de mí. A intentar inutilmente contar cómo me siento, y cómo he cambiado en 5 años...
Pueden parecer que no son nada... ¿5 años? Eso pasa volando. Y para mi desgracia, sí.
Podréis pensar que estoy loco, que sigo siendo un crío en la mayoría de las cosas, pero me siento viejo... Ya no tengo ni la fuerza ni la vitalidad que tenía antes, cuando me podía pasar semanas sin descansar un segundo, viviendo 24/7.
De veras añoro esos tiempos, volver a reiniciar "la vida" después de la infancia.
Aunque también tuvieran cosas malas, pero eso es otro tema.
Siento de veras que el tiempo se me acaba... Que ese reloj que parecía ir lento, acelera a una velocidad bestial, y que lo que antes me parecía una eternidad, ahora es un simple segundo. Siento que los días pasan demasiado rápido, y sin aprovecharlos en nada. Antes, en un día podías aburrirte de hacer cosas, y ahora ni siquiera me da tiempo a pasar hoja en el calendario.
A veces me siento como si yo estuviera en un escenario, sin nada que decir, y con todo el mundo mirándome. Esa angustia, que a veces me supera. Porque con los años, me estoy dando cuenta de que cada vez soy más neutro, menos virtudes y más defectos. Ahora simplemente soy "uno más", o quizás sea el puto invierno, que me quita las ganas de todo. No me considero especial, si es que alguna vez lo he sido. Soy una persona perfectamente normal, sin nada que ofrecer, salvo detalles que demasiada poca gente apreciaría.
Y ahora mismo me estoy imaginando lo que me dirían varias personas si leyeran eso. No se, pero creo que conozco demasiado bien a la gente, pero casi nadie en este planeta sabría decirme cuales son, simplemente, mis aficiones.
No entiendo a las personas que se conocen solo "una porción" como me pasa con casi todas (salvo mi queridisima Sandra), y se tratan como amigos del alma. No entiendo cómo, si alguien te cae bien, o es simpático, hay gente que no se interese, y prefiera simplemente callar la boca que preguntarte si algo te gusta, aunque esa respuesta pudiera marcar el inicio de una mejor relación. No entiendo al mundo, y esto se agrava con los años.
No entiendo por qué leyes estúpidas me atan, porqué todo se basa en el dinero, y no en sentimientos, ideas, o humanismo. Que eso es precisamente lo que le falta a este mundo. Que me digan cómo tengo que moverme, a qué velocidad, de que manera. Lo siento, pero esque no soy compatible con el orden.
Lo que le hace falta a este mundo, es menos cabeza, y más corazón.
miércoles, 30 de marzo de 2011
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Kevin me ha encantado la entrada, sobre todo el final.
ResponderEliminarPero no estoy de acuerdo con tu punto de vista sobre la vida. La vida es maravillosa y hay personas que también lo son. Solo hay que encontrarlas.
Uhm, no sé si a lo mejor entendiste mal. La vida es lo mejor que tenemos, porque todo lo demás se basa en ella. Si no hay vida, poco puedes hacer. Eso quiere decir que tiene todo lo bueno, y todo lo malo.
ResponderEliminarEstamos de acuerdo que hay que saber mirar lo bueno, y aprender de lo malo. Eso es así, para todo el mundo. Y sobre la gente, habrá millones de personas buenas, mejores o peores. El problema es que muy pocas personas malas, hacen mucho daño. Tienes el ejemplo en Libia.
También tienes el ejemplo de personas buenas, héroes los llamaría: Los técnicos que entraron en la central de Fukushima hace nada, con una probabilidad altísima de morirse, sólo para salvar al mundo (literalmente, porque si eso llega a hacer pum...)
Solamente digo que, nose, cuando, tu bien lo sabes, teníamos 14-15, y andábamos todos en grupo, no te parecía que por ejemplo quedar un sábado a las 4 y ir con las bicis era lo mejor que te podía pasar? Una tarde con colegas, pasándolo bien, y nosotros a las 10 para casa (tu a las 10:30, me acuerdo)
Y sin embargo ahora hay mucha gente, entre los que me incluyo, que necesitan mucho más que eso para ser felices, considerar un día bueno, o casi soltar una sonrisa.
Nobody dies a virgin, Life fucks us all.
Me ha gustado, totalmente de acuerdo, por desgracia...u_u hoy por hoy nadie se esfuerza ya en conocer a la gente, ademas el otro día me dormí pensando en que echo de menos conocer gente, pero no de hola y adiós, sino de verdad, de poder tirarme horas hablando sobre cosas, sean en comun o no, que nos gusten... de hecho apostaría a que la última vez que conocí a alguien de esa forma fue a ti, y encima fue hace mas de un año (osea, que ahora hoy por hoy es como que se ha perdido, claro u.u)
ResponderEliminarAnyway, sobre lo que dices en el comentario, creo que hoy por hoy lo que yo, personalmente, necesito para ser feliz de esa forma, es precisamente, una tarde con mis amigos, en un parque mismo, hablando de lo que sea, en lugar de tanta fiesta. Pero parece que es mas dificil hacer lo primero, aunque suene mucho mas sencillo... Una mierda, ¿eh?
La "fiesta" es el cáncer de la humanidad, lo juro.
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